Entre los sonidos de la mañana, la música a todo volumen de un idiota, la gente que se levanta, los cafés que se preparan y el calor de unos cuantos abrazos, yo escribo; trabajando o recordando, es lo mismo.
Son las 6:40 de la mañana. Creo que puedo decir este es uno de los posteos que más temprano he escrito. También puedo decir que podría ser uno de los más cortos porque realmente estoy trabajando y sin tener mucha prisa, quiero cumplir mi promesa a Gaby, la de dedito.
Sólo escribo para recordar una cosa... A Gaby durmiendo...

Si cuando está despierta yo sé que Gaby es la mujer con la que yo quiero seguir hablando, riendo, llorando (de felicidad, obviamente), jugando, experimentando y muchos otros etcs, cuando duerme me doy cuenta que Gaby es la mujer también con la que quiero levantarme el resto de mi vida, ver mientras duerme y abrazar cuando hace frío y cuando no. Además, cuando le salen las alas suelta un poquito de polvo de hadas que hacen que los sueños se vuelvan mucho, mucho mejores, razón por la cual extraño infinito que no duerma conmigo a veces...
Y eso sería todo. Yo seguiré trabajando. Y tal vez siga posteando cositas todos los días como esta. ¿Quien sabe?
¡Abrazos!
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