¿Es lo mismo decir cuidado con lo que deseas que cuidado con lo que crees deseas? Quien sabe, pero de fijo, todo tiene una razón de ser...
Sé que ha pasado su buen tiempo desde que escribí la última vez. Sé también que tengo una trilogía de posteos que esperaba que yo tuviera tiempo y ahora, espera que yo tenga disposición. Y finalmente sé que si tanto quería huir de la comodidad, iba a terminar metiéndome en problemas, aunque fueran temporales.
El Miércoles empezó como un Miércoles cualquiera. Gaby había dormido la noche anterior, todavía estaban los platos de pasta sin lavar en el desayunador, sonó la alarma y yo me levanté, dejando a la mariposita envuelta en su capullo. Me senté en la silla, pelié tanto con el vampiro como con el aventurero, me acomodé, me comí una galletita y empecé a abrir las páginas del trabajo. Y Catalum... Todo cambió.
Eso es lo que tuve que ver por lo menos 5 minutos seguidos para poder reaccionar. Pero bueno, me habían cambiado la contraseña anteriormente, y traté de localizar a mi jefe, usando el digno Gmail; no estaba, tal vez dormía todavía y yo, ni lento ni perezoso, me volví a acostar con Gaby. No sé cuantas veces me levanté y me fijé en la pantalla, pero sé que en una de ellas, me di cuenta que me habían respondido. Me levanté, me acomodé en la silla y esperaba sinceramente la nueva contraseña pero... Cataplum, no había tal: Me habían despedido.
Crónicas y los pocos que lo leen saben que trabajar en HM era parte de la rutina de cada día que me daba el pan, la luz, el celular, y los regalos de Gaby; era la razón por la que podía vivir solo y sin problemas, y la solución para poder estudiar en dos universidades el próximo año y poder salir a flote; y también, era la razón por la que todos mis planes a futuro funcionaban o sonaban posibles. Pero el Míércoles, perdí todo eso; todo eso y un poquito más.
Creo (porque no lo recuerdo bien), que cuando me dieron la noticia reaccioné como si todo fuera una broma. Media hora después, estaba llorando y con dolor de cabeza, pensando en todo lo que ser despedido significaba: No poder pagar el apartamento, ni el depósito que todavía estoy debiendo, no poder pagar la Judas Tadeo el próximo año, no poder comprar regalos para Gaby, no comer, y otros muchos más. Realmente me habían jodido y en grande.
Sí, lo admito y no me da vergüenza. Ese Miércoles Gaby, después de levantarse y yo decirle que me habían despedido casi llorando, me pasó chineando y dando apoyo, haciéndome creer que todo pasa por una razón y que si me habían despedido, era para lo mejor. Sí, yo todavía estoy cruzando los dedos esperando que Allah, Buda, Krishna y otros hagan de Gaby una profeta y no una pajosa, jeje. (Mentiras Gaby, yo sé que vos no sos una pajosa... Pajoso sólo yo y a veces).
Ahora, un día después, estoy más tranquilo. Sé que de verdad perdí mi trabajo para conseguir algo mejor, y que no hago nada estresándome por algo que específicamente no puedo solucionar ya: Me refiero a HM en particular, no al hecho de perder trabajo, porque obviamente no me voy a sentar en la cama a rascarme las bolas esperando que el "universo provea así como así"... También, mi jefe me dijo que tengo trabajo asegurado para quince días o un mes, por lo que ahora sólo tengo que conseguir un trabajo que me reporte como mínimo 110 mil colones para pagar el alquiler, por lo que las cosas no están tan mal... Y si fuera el caso, pediría uno de esos préstamos escabrosos y lo pagaría luego... En otras palabras, opciones sobran.
Pero igual molesta, porque era lo más cómodo del mundo. Me pasé de apartamento por la comodidad y ahora perdí mi trabajo exactamente por lo mismo: tanta fue la "energía" que le pusé al hecho de perder mi comodidad y empezar de nuevo, para mejorar. ¿Qué conseguiré de trabajo ahora? No tengo ni idea... Tengo una cita mañana a las 2 para un trabajo relacionado con turismo y he enviado por lo menos 4 correos con mi CV (o Resume cuando eran en Ingleś, jeje) y todavía estoy esperando que va a pasar. Y ya definí que si para el Miércoles no he conseguido trabajo todavía, me voy para McDonalds; total, por lo menos tendría comida gratis.
Y como diría el título, así de fácil dejé de ser puta virtual. Trabajé por más de un año y medio en el que gané, aproximadamente, como dos millones y medio de colones que se fueron en comidas, guaros, salidas, regalos y gastos; respondí un promedio de 2000 desde que empecé a trabajar, con algunas excepciones, y sacaría el total aproximado si no fuera porque odio los números, jeje; y me gané la confianza de mis jefes, demostrándoles que podía hacer loas cosas bien, aunque los gringos jefes de la mierda esa pensarían lo opuesto el Mïércoles.
Ahora, como podrán imaginarse, paso un poco estresado por no tener trabajo, por lo que los posteos alegres, despreocupados, y tontos tendrán que esperar por un tiempo. Pero cero estrés, se los debo, jeje.
Y con eso los dejo ahora. Tengo que precouparme por ir a pelearme por una película, llamar a un número que que le sonó a Gaby inapropidamente en su primera entrevista y tal vez, descansar un poco. ¡Nos hablamos luego!
P.S: Tal vez Gaby y yo consigamos irnos por toda Latinoamérica haciendo encuestas con todos los gastos pagos... ¿No serían eso genial?
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