TiraEcol

Tira Ecol

lunes, diciembre 24, 2007

Volvemos a trabajar, con una pereza infinita

Ya terminaron las vacaciones, otra vez. Toda esta semana, será lo mismo que la pasada, 600 correítos diarios. Hoy es especial porque teniendo la cena navideña en la casa de Chewie a las 8 p.m, tengo que terminar esos 600 lo antes posible, si quiero volver a tener un domingo libre, como fue ayer.

Pero por el mientras tanto, tengo muchas otras razones para estar feliz. Parece que Gaby va a hacer todo lo posible para venir a Año Nuevo y pasarla juntos, con una variante de que sea yo el que vaya a Ciudad Quesada a celebrar con la familia; por razones obvias, preferiría quedarme por acá. Además, ya la mamá me anda buscando como chofer oficial en sus paseos de Semana Santa, lo que me llamó poderosamente la atención. ¿Será sacar la licencia la solución a mis problemas de aburrirme en puta en mis semanas santas? Claro, hemos de recordar que este ilustre pseudo escritor no maneja absolutamente nada desde principios de año y aunque llegó a ser bastante bueno, las habilidades, sin práctica ni constancia, pierden esplendor. Es claro que no había llegado al nivel de "lo que bien se aprende, nunca se olvida"...

Además, ¡¡Ya me vinieron a dejar mi entrada de Maiden!! Impresa, hermosa, con letras claras (Menos en Sim n Acosta, por una ó con tilde que le quitaron). Ya la tengo, nadie me la puede quitar, y ese día estaré viendo uno de los mejor Tour que podría esperar disfrutar. Claro, sigo pensando que ciertas personas no deberían ir (ciertas personas que en un exceso de inmadurez habían estado fastidiando en concepto de milagro y demás cosas), pero bueno. No importa. Yo ese día estaré solo (tal vez con Oscar, el compa de Gaby), y no dejará de ser demasiado bueno. Hasta con el pichazo de Maras (Sí, Maras) será algo digno de recordar.

Y bueno, sigo escribiendo los Tres Cisnes Plateados, el libro que empezó siendo un cuento y que ahora lleva casi 80 páginas. (Puta, tengo hambre. Voy a tratar de no comer ese puto arroz con pollo seco del chino, que no llena nada). Debería estar durmiendo de aquí a las 2 p.m, que es cuando empiezo a trabajar. Pero decidí empezar más temprano aún, a las 12:30, dentro de una hora, para salir de eso aún más temprano. Igual, aunque estoy leyendo Vergüenza de Rushdie, hoy por alguna razón no quiero leer. Tal vez un tributo a Vina y Ormus y un Rai practicamente casado... Tal vez porque estoy loco. O aún más, porque hoy tembló y eso era de un libro, no de una realidad.

¡Ciao!

1 comentario:

Carlos M. Espinosa dijo...

Listooo!!! ya sta men!!