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Tira Ecol

martes, enero 08, 2008

Después de los 300...

No, no estoy hablando de la famosa película basada en la pelea en Termópolis y en el heroísmo de Esparta. (Claro, ¿Ustedes sabían que entre esos "300" soldados tenían que a güevo haber mujeres, debido a la educación espartana?). Pero realmente estoy hablando de que terminé los malditos 300 correitos matutinos y que ahora por fin soy libro por unas 9 horas para hacer lo que me de la gana, así que hagamos un recuento.

Hoy es una continuación del ayer. Eso suena harto lógico, pero hay una razón específica para decirlo. Ayer hice feo con Percantilla y hoy nos vemos para seguir, comiendo, riendo, haciéndonos cosquillas y fastidiándonos la existencia. Nuevas planes se fraguan en la melancolía y el rencor de un abandono tonto y el celular que llevaba una semana sin sonar por fin da paso a un suave repicar antes de que la IDIOTA colgará. ¡Oh Percantilla, hermanita rara! (Foto Archivo: Putito y Percantilla)

Además, hoy es cuando entrego el formulario de carrera para periodismo. Lo tengo que llenar y todo, y tengo que cruzar los dedos para que me lo den. Si lo logro, el próximo semestre llevaría tres cursos de Filología y tres de Periodismo y Salud Ocupacional la llevaría hasta el próximo año, cuando lleve menos de Filología. Algunos verán en esto un despiche, pero todo tiene su razón de ser. Amo la Filología Clásica pero no voy a vivir de eso, por lo que puede ser dejada para más tarde. Amo al Periodismo y creo que podría jugarmela bastante bien en ese mundillo, pero por si las moscas, saco el Título de Salud Ocupacional que no me falta mucho para poder trabajar en eso. Además, empiezo a cumplir cierto trato que tengo por ahí con cierta señorita...

Pero bueno, todo va poco a poco. Me tengo que bañar para encontrarme con Percantilla y ver que pasó por fin con sus líos románticos; tengo que hablar con Gaby y decirle que ya sé lo de la matrícula (Guía de Horarios para el 25 y Prematrícula para el 2 de Febrero); tengo que recordar mi sueño con Maiden y otras cosas sumamente importantes. Y tengo que sonreír, muy importante... ¡Ciao!

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