Cuando uno se acostumbra a que en las vacaciones la normativa sea quedarse en la casa, trabajar y no salir ni del barrio, hasta Heredia parece ir a otro país.
Puede ser que no fuera ir a Ciudad Quesada como me hubiera gustado, para estar con Gaby, pero hoy terminé yendo, con Yeri, a la casa de Percantilla en Heredia, como parte de una promesa que hace ratos tenía que cumplir.
Y entre tantas cosas, y entre lo mucho que me hace falta Gaby, pude recordar lo relajante que se sentía estar en un pequeño lugar apartado de un mundo de hombres lascivos, páginas gringas y música repetitiva todo el día. Comí como no comía desde que estuve en la casa de Gaby - aunque de una forma mucho menor, obviamente - con lasagna, café y galletitas como menú. Me arreglé con mi sobrina, Luna, que estaba un poco resentida conmigo y pudimos terminar en buenos términos. Dormí con Yeri, Percantilla y Luna todos tirados en el zacate, con las hormigas que caminaban y picaban. Y para finalizar la noche, pasé casi dos horas sentado ante una mesa jugando un juego con mis dos acompañantes de decir palabras que empezarán con "T", juego del cual se rindió Yeri y quedamos Percantilla y yo sin ganar ni perder, con la continuación pendiente. (Foto creada por Percantilla en Photoshop de nuestra versión aliens)
Ahora recién llego y me doy cuenta que cansado y todo, puedo sonreír un poco... Podría estar mega feliz, más aún con las casi tres veces que he hablado con Gaby, pero eso es un rollo aparte. Como pasa generalmente, dije una estupidez y todo paso de un puro amor a una pura confusión, tristeza y arrepentimiento. Y todo porque dije una frase sin pensar. Ahora no sé si Gaby vendrá o no el Jueves, o aún si la veré en Febrero, y aunque estoy sumamente (...), no puedo escribir más. De este tema no tengo nada que decir.
P.S: Tengo que escribir algo más, antes de que se me olvidé. Primero, las películas ya las revisé Gaby. La primera no creo haberla visto todavía, la de Sisterhood of the Traveling Pants. La segunda, la de Monica Bellucci, se llama Le concile de Pierre y es de hecho del 2006.
Lo segundo es que logré definir el cuarto libro más importante de mi vida, hoy que hablaba con Gaby caminando por la Avenida Central. Como ya sabe - creo - mis libros favoritos se dividen en las etapas mas significativas y son así. Nótese que el libro núméro 3 es el recién agregado a la lista:
1) Niñez: El Cartero trae domingo.
2) Adulto y soledad: El mundo según Garp.
3) Adulto y ser amante: La insoportable levedad del Ser.
4) Adulto y amor: La Ladrona de libros.
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